Letras Desnudas || Miseria y oportunismo

Letras Desnudas || Mario Caballero

Luego de varios días de la tragedia en el parque San Marcos de Tuxtla Gutiérrez, donde dos mujeres perdieron la vida en el colapso de una estructura metálica, las investigaciones deben continuar y establecerse las debidas responsabilidades.

Sin embargo, llama la atención la miseria y el oportunismo con que diversos actores y grupos políticos han utilizado la muerte de estas dos personas y el dolor de sus familias para sacar ganancias políticas.

Pues no pueden ser otra cosa más que miserables y oportunistas aquellos políticos que se aprovechan del sufrimiento para tratar de infamar a sus oponentes y obtener sus quince minutos de notoriedad. Como los que intentaron culpar al alcalde Ángel Torres Culebro de la tragedia alegando que había desviado los recursos para el mantenimiento urbano a su reciente campaña política.

Pero vayamos por partes.

EL ACCIDENTE

Empecemos por establecer que se trató de un accidente.

¿Qué pasó? Una parada de transporte colectivo, hecha de metal en la base y con techo de madera, se cayó sobre un costado, prensando a dos mujeres contra el piso. Estas personas caminaban por el lugar cuando se desplomó la estructura. Tristemente, pasaron en el momento y el lugar equivocados. Lamentable.

De una de las víctimas no se dio a conocer el nombre, por lo menos no al momento de redactar estas líneas. La otra se llamaba Tania Guadalupe Gómez López. Era estudiante de la carrera de Enfermería en la sede Venustiano Carranza de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas.

De acuerdo con los videos difundidos en las redes sociales, se ve que la estructura cae sobre el costado donde están amarradas varias lonas, que fueron azotadas por los fuertes vientos registrados el jueves 20 de marzo.

Un día antes, maestros de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) instalaron un campamento en dicho parque con motivo del plantón que llevaron a cabo durante el 19, 20 y 21 de este mismo mes para exigir la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007, el cálculo de las pensiones en pesos y no en UMAs, la reinstalación de profesores cesados, la jubilación a los 28 años de servicio para las mujeres y a los 30 para los hombres, aumento salarial, entre otros. Las lonas eran de ese campamento. De hecho, se contabilizaron alrededor de 62 lonas en total colgadas en el parque, ya sea amarradas en los postes de las luminarias, en los árboles o en la parada del transporte público.

Un reporte de la Fiscalía General del Estado indica que de acuerdo a las diligencias periciales la causa del derrumbe de mencionada estructura se debió al deterioro por corrosión de los materiales, es decir, estaba oxidada. Podía colapsar de un momento a otro.

Por tanto, la tensión de las lonas, más el fuerte viento, aumentaron la probabilidad de la caída de la estructura, con las lamentables consecuencias.

¿Se puede culpar a los maestros por haber tendido las lonas entre la estructura y los postes de luz, tal como hubo algunos desafortunados señalamientos en las redes sociales? Obviamente no.

La CNTE puede ser responsable del caos que provoca cada vez que saca a los docentes a marchar y realizar plantones, del deterioro de la educación en Chiapas y del daño al erario por los cientos de millones de pesos que ha negociado con los anteriores gobiernos a cambio de llevar la fiesta en paz y que según están invertidos en los ranchos, las residencias y los automóviles de lujo de los dirigentes, pero no de la caída de la parada de colectivos.

Además, comprendamos que toda estructura está diseñada y construida para un fin específico. Por lo cual, la calidad y especificaciones de los materiales están calculados de acuerdo a su propósito. Y esto incluye el peso que debe soportar. Por ejemplo, la montura de un anuncio espectacular, el poste para una luminaria o, como es nuestro caso, una estación de transporte público.

Por esa razón, la estructura cayó precisamente hacia el lado donde estaba siendo tensada por las lonas.

Total, es claro que se trató de un accidente. Nadie sabía el día ni la hora en que sucedería y mucho menos fue provocado.

INFAMIA Y VILEZA

No estoy aquí para negar responsabilidades, ya que las hay. La forma en que ocurrió el percance nos indica que hubo funcionarios que no cumplieron con darle el debido mantenimiento a la estructura o que de plano fueron omisos al no sustituirla. Empero, no era ese día en que debieron hacerlo, ni uno antes, sino desde hace varios años, considerando el nivel de corrosión.

Peor todavía, ese esqueleto metálico tiene más de dos décadas de haber sido instalado. Y a saber cuántos gobiernos cumplieron con darle mantenimiento. Si es que alguna vez le dieron.

Lo que pretendo es exhibir la miseria y el oportunismo que hay en la política chiapaneca, y que se manifestó en su estado más puro en el marco de este accidente.

Comprendamos: una cosa es criticar las decisiones, errores y abusos del gobierno y otra muy diferente utilizar la muerte de dos personas para atacar al gobierno o, como es el caso, a un gobernante: Ángel Torres Culebro.

Entiendo la necesidad que tiene la oposición de hacerse notar y ganar puntos con la sociedad. Pero no por eso tiene que actuar con vileza. Como lo fue colgarse de una tragedia para llevar agua a su molino.

Es más, hasta para hacer el menor de los cuestionamientos hay que ser congruentes. Usar la cabeza pues. No como lo hicieron algunos políticos e incluso el PRI estatal al acusar a través de sus cuentas de redes sociales que Ángel Torres había utilizado el dinero del mantenimiento urbano en su reciente campaña electoral.

Pregunto: ¿cómo iba a disponer Torres Culebro de esos recursos si no tenía facultad para hacerlo? Menos todavía si el que realmente podía, el exalcalde Carlos Morales Vázquez, era uno de sus adversarios políticos, quien incluso fue acusado de desviar varios millones de pesos para impulsar la candidatura del priista y exsecretario de Movilidad y Transporte, Aquiles Espinosa García, al que quiso imponer como su sucesor a través de las siglas de Morena.

Así, qué lamentable que estas dos mujeres hayan perdido la vida al caerles encima una estructura vieja y oxidada, que debió ser retirada desde hace mucho tiempo. Qué mal que las pasadas autoridades no cumplieron con su deber de realizar el mantenimiento de las estructuras urbanas, lo cual pudo haber evitado el accidente. Y qué reprobable que políticos sin escrúpulos hayan intentado desacreditar el trabajo de Ángel Torres explotando una tragedia que enlutó a dos familias.

Aunque esto, en el fondo, pone evidencia la estulticia e incapacidad de los críticos y opositores del alcalde capitalino, quienes quieren ganar con campañas de difamación lo que no han podido con buenos argumentos y menos con acciones provechosas.

yomariocaballero@gmail.com