En la Mira / Héctor Estrada

Comienza en Chiapas la guerra de encuestas electorales 

La guerra de encuestas electorales en Chiapas ha comenzado oficialmente su temporada de mayor auge. Esta vez fueron los resultados de la encuesta publicada por la empresa Beltrán, Juárez y Asociados (BGC), que colocó por primera vez a la cabeza de las

preferencias a Roberto Albores Gleason, quienes desataron una avalancha de críticas, burlas y confrontaciones entre simpatizantes del abanderado priista con opositores a su candidatura.

Aunque no se trata de la primera encuesta en torno a la elección para nuevo gobernador de Chiapas, sí es la primera con los candidatos formalmente registrados ante el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC). El ejercicio estadístico realizado por BGC coloca a Albores Gleason (con el 42 por ciento) apenas tres puntos porcentuales por encima de Rutilio Escandón Cadenas de Morena, que registró una preferencia del 39 por ciento de los encuestados.

Muy abajo se ubica el abanderado de la coalición “Por Chiapas al Frente”, José Antonio Aguilar Bodegas, con 18 por ciento de las preferencias. Según la información de la propia empresa, la encuesta se realizó entre el 23 y 27 de marzo a un total de mil 200 personas entrevistadas “cara a cara”, bajo encargo de la empresa editorial La Voz del Sureste, propiedad del empresario priista Simón Valanci Buzali... Y las reacciones no se hicieron esperar.

La drástica diferencia porcentual con respecto a la encuesta presentada el pasado mes de enero por la empresa Massive Caller de Carlos Campos Riojas desató una ola de furiosas desacreditaciones contra los nuevos resultados. Y es que, apenas hace dos meses y medio Massive Caller había colocado a Escandón Cadenas muy por encima de los demás candidatos con el 33.8 por ciento de las preferencias, dejando a Aguilar Bodegas en el segundo puesto con el 15.7 por ciento y a Albores Gleason con 13.1 por ciento.

La encuesta de Massive Caller, que colocaba a Escandón Cadenas 20 puntos porcentuales por encima de Roberto Albores, fue realizada a casi el mismo número de personas encuestadas (mil 100), perfilando una tendencia aparentemente difícil de remontar. No obstante, los nuevos resultados pondrían sobre la palestra electoral un vuelco drástico en las supuestas tendencias. En menos de tres meses Albores Gleason habría no sólo alcanzado a Escandón, sino también comenzado a superarlo en las preferencias electorales.

Hay quienes incluso calificaron y difundieron a la encuesta en diversos portales como Fake News o Noticia Falsa. Sin embargo, el asunto va más allá. La publicación de los resultados del trabajo realizado por BGC advierte el inicio formal en Chiapas de la habitual guerra de encuestas electorales como una clara estrategia de manipulación a la percepción ciudadana, ya bastante utilizada y prostituida en periodos electorales del pasado. 

Se trata pues de un negocio redondo que bastante engordó los bolsillos de empresas encuestadoras como Mitofski, cuyo comportamiento sospechoso terminó por arrebatarle la credibilidad. Por eso el tema hoy se aborda con mayor recelo y genera inevitables reacciones de descrédito inmediato. Ya no tienen el mismo efecto que aportaban hace menos de 10 años. La responsabilidad aquí será hacer lecturas mucho más meticulosas sobre los datos y el origen de dichos trabajos estadísticos.

Con el inicio de las campañas seguramente la cascada de cifras será parte del acontecer electoral. Se trata de una elección que nuevamente ha dejado al electorado chiapaneco entre la decepción, la frustración y la ausencia de opciones convincentes. Con el paso de las semanas, el bombardeo de información tendenciosa y abrumadora irá en crecimiento, por lo que tocará a los electores realizar el valioso trabajo reflexivo que es al final de cuentas el mayor baluarte de las democracias verdaderas… así las cosas.