Vulnerabilidad y susceptibilidad ante desastres geológicos volcánicos y sísmicos

Jeny Pascacio

En entrevista a la doctora Silvia Guadalupe Ramos Hernández, directora del Instituto de Investigación en Gestión de Riesgos y Cambio Climático para hablar de los impactos de los fenómenos naturales, la vulnerabilidad de la entidad y el monitoreo que se realiza desde la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas.

Primeramente, recordaron los fenómenos como la erupción del volcán Chichonal en 1982, las inundaciones causadas por Stan en el 2005 y el terremoto de magnitud 8.2 que afectó a Chiapas y Oaxaca de manera importante.

“Chiapas es una región muy proclive a la vulnerabilidad y susceptibilidad ante desastres geológicos volcánicos y sísmicos. Pero en el cambio climático la acción humana está exacerbando y modificando puntualmente diferentes regiones, el país y el mundo”, reconoció.

En cuanto a la sismicidad, dijo que la mayoría de los movimientos no logran percibirse pues van de la magnitud 2 a la 5, “pero diariamente es una cantidad significativa de sismos; por ejemplo, llevamos más de 2 mil 200 sismos en lo que va del año”.

Partiendo de la vulnerabilidad, los riesgos sísmicos y volcánicos en el estado, enfatizó que estos temas deben hablarse una y otra vez con la población.

“No son castigos de Dios ni violencia de la naturaleza, son fenómenos que han ocurrido permanentemente a lo largo de la historia de la humanidad y se han sabido de casos catastróficos históricos: volcánicos, sísmicos en todo el mundo que han generado desastres”.

Con el conocimiento científico y la tecnología con la que están vigilando y monitoreando estos fenómenos en la actualidad, dijo que existe mayor información que debe ser difundida en lugar de noticias falsas.

“Vivimos en una región propensa a estos fenómenos, tenemos un volcán como el Tacaná (casa de fuego en Mame) que es un volcán peligroso porque es muy elevado, muy grande, porque vive mucha población en sus faldas y por si fuera poco tenemos cuencas muy grandes que son capaces de arrastrar muchísimo material volcánico”.

“A través de nuestras prácticas multidisciplinarias hablamos de estos temas a la población local, sobre todo a los niños que no vivieron el fenómeno como los adultos; pero es una transmisión del conocimiento científico, porque no debemos ver a estos volcanes con terror o como enemigo”.

El Chichón, por ejemplo, tiene tres estaciones sísmicas al igual que el Tacaná, ambos activos en la actualidad. La información se transmite permanentemente al Centro de Monitoreo en la Unicach y se retransmite al Sismológico Nacional y al Cenapred de la Ciudad de México.

“Ahora, a diferencia de 1982, existe una condición en los volcanes de poder advertir con tiempo de horas y de días o incluso de semanas para notar la evolución y poder trabajar con la gente el mecanismo de evacuación que tiene contemplado Protección Civil”.

CAMBIO CLIMÁTICO:

La vulcanóloga se dijo asombrada, al igual que otros expertos, por lo que ocurre en Europa en estos momentos, “son motivos de mucha preocupación”, pues por décadas los humanos hemos modificado el territorio, “y esto hay que admitirlo”.

“Qué está pasando con el cambio climático: están sucediendo situaciones cambiantes, precipitaciones extraordinarias que arrojan toda la lluvia que podía pasar en un año completo y la capacidad de absorción del terreno o las ciudades es imposible”.

Los huracanes, por si fuera poco, cada vez tienen más intensidad, “el cambio climático es una realidad; si superamos 1.5 grados por arriba de las temperaturas globales a nivel mundial vamos a tener toda esta parte de clima totalmente cambiante, con lluvias caóticas por la tremenda alteración”.

En Chiapas, las afectaciones por la amplia deforestación en la región montañosa y la erosión de los suelos de ladera concluirán en efectos lamentables de inundaciones, lamentó Silvia Ramos.

“Hay que reforestar con conciencia, la naturaleza no es violenta, nosotros modificamos el entorno sin saber lo que vendrá después”. Recordó que las Naciones Unidas promueven de 2021 a 2030 la década de la restauración de los recursos.

Ante esta situación, dijo que la Unicach también forma profesionales en la Licenciatura en Ciencias de la Tierra y la Maestría en Gestión de Riesgos y Cambio Climático para formar un cuadro de profesionales que tienen que tener en sus manos las dependencias, “porque ya es nuestro futuro”.