La Feria || Sr. López

*** Topetazo 

Tío Arcadio era un macho de diccionario enciclopédico, macho como de película en blanco y negro, de las de antes. Dueño de un “rancho” -que de lado a lado se recorría en dos semanas a caballo-, a su voz se plegaban caporales y peonada, nadie discutía su autoridad y en Autlán, pocos le sostenían la mirada; pero su esposa, tía Mariquita, mandaba a sus nueve hijos, a su numerosa servidumbre… y a él también, que la obedecía explicando: -Le ordené que mandara y me obedece –no daba su brazo a torcer, decía la abuela Elena, sonriendo.
“Con la iglesia hemos topado, Sancho”, es un lugar común repetido hasta el vómito, atribuido a Alonso Quijano, cuando el mejor conocido como Quijote de la Mancha, ni siquiera dice eso a su fiel escudero. Lo que dice cuando se da cuenta que no llegaron al palacio de Dulcinea, sino contra los muros del templo, es: “Con la iglesia hemos dado, Sancho”, y le responde el sensato gordo: “Ya lo veo y plega (plazca) a Dios que no demos con nuestra sepultura (…)”, porque junto a los templos estaban los cementerios.
La frase se usa para decir que alguien ha topado con una dificultad insuperable. Bueno, doña Sheinbaum va rumbo a Palacio Nacional, en montura superior a Rocinante (cuantimás que Clavileño), sí, pero no imaginaba qué pronto toparía con la iglesia. Y ya topó.
No se refiere este menda al inicio, hoy, de los cómputos en los 300 distritos electorales, acta por acta de cada casilla, con los documentos originales firmados por los representantes de los partidos políticos. Cómputo en el que habrá variaciones, como siempre, por errores de los funcionarios de casilla, que a veces meten la pata al escribir los números con palabras, por sumas mal hechas, o trampas burdas como casillas “zapato” o con más votantes que electores. Por lo pronto, informó el INE que abrirán el 60% de los paquetes electorales, para recontar voto por voto de la elección presidencial y también del Congreso de la Unión, diputados federales y senadores. Y ese 60% no es escándalo ni sorpresa, en 2018 se abrió el 77% de los paquetes.
Aparte se podrán abrir y recontar más casillas, todas sobre las que los partidos presenten impugnaciones. De veras, no creamos el cuento de los fraudes en el sistema de cómputo ni zarandajas varias que inundan las redes. El recuento final es invulnerable, es a mano y en presencia de representantes de partidos y funcionarios del INE. Paciencia.
Pero, eso sí, doña Sheinbaum se queda con el triunfo, así le quitaran miles de votos, digo, que ganó con un margen inmenso (y en no mucho tiempo, doña Xóchitl le agradecerá al Buen Dios no haber llegado ella, cuando la realidad alcance al siguiente gobierno federal… nada más con la inseguridad pública tienen para entretenerse o con hacer de nuestro sistema de salud uno como el de Dinamarca y tantas cosas más: justicia divina, ellos hicieron el tiradero, ellos lo levantan, si pueden).
Con lo que ya topó doña Sheinbaum, ante la terrible posibilidad de que gane mayoría calificada en el Congreso, para poder hacer charamuscas con la Constitución, es con la fuerza del dinero, que le devaluó el lunes el peso, hasta hacerla la divisa más depreciada del mundo, frente al dólar en ese día. Y aparte se derrumbó un 6% la Bolsa Mexicana de Valores y eso es terrible, en treinta años, solo 15 días ha caído tal porcentaje la Bolsa. Y lo que sigue, si sigue, es una estampida de capitales… ¡y abur economía mexicana!
Lo anterior, antes de que la doñita asuma el poder por si tiene malos pensamientos y en septiembre, antes de asumir el cargo, empuja el plan C, con sus legisladores. Como trompetazo de aviso: ¿plan C?… pues aprovechen, que las grandes firmas de inversiones y los empresarios, sacan su dinero y que les mantenga la economía el Santo Señor de Macuspana, si hace milagros (no hace).
Le he comentado antes que doña Sheinbaum es inteligente. Es. Por eso ayer martes, de emergencia, respondió a esas presiones del capital grandote en los mercados bursátil y cambiario, mandando a Rogelio Ramírez de la O, que será su Secretario de Hacienda y hoy lo es del señor de Palacio, a tranquilizar los mercados del dinero.
Don Ramírez emitió un comunicado comprometiéndose a varias cosas, entre ellas a respetar el Estado de Derecho, que es lo que le importa a los que manejan mucho dinero. Y ella misma a través de X (Twitter), dijo que se reunió con don Ramírez, ratificó los dichos de él y se comprometió a mantener comunicación con inversionistas y agencias calificadoras y a explicar a organismos internacionales e inversionistas su proyecto en materia económica (¡zambomba!, eso, nunca en su vida lo ha dicho López Obrador… sí, ella no es tonta).
Sin embargo, de parte de Citibanamex que es parte del cuarto banco más grande de los EUA, un tal Iván Arias, su director de Estudios Económicos en México, dijo a la muy poderosa agencia internacional de noticias, Associated Press (AP), que los anuncios de don Ramírez, “ayudan de manera marginal” porque “persistirán las preocupaciones”, hasta saber, entre otras cosas, “cuál será el futuro del paquete de reformas que presentó en febrero el presidente Andrés Manuel López Obrador al Congreso”, el afamado plan C. ¡Topetón con el dinero!
Por cierto, el plan C, incluye cosas que van a contrapelo del T-MEC y los tratados tienen la misma fuerza legal que la Constitución… sí, no es lo mismo hablar de ella que tenerla enfrente, doña Claudia y si quiere gobernar un país paria, pásele a lo barrido, póngase necia.
Y don Biden, que felicitó el lunes a doña Sheinbaum, ayer le echó un telefonazo al señor de Palacio. La Casa Blanca informó que en la plática, se subrayó la importancia de mantener su “fuerte” colaboración… “y a garantizar una relación bilateral estable y productiva durante la transición a la administración de la Presidenta electa Sheinbaum”. Traducción de “estable y productiva”: no des lata con tu plan C, ya luego nos arreglamos con doña sucesora. Tú, a tu finca.
Brincó el capital y brincó el tío Sam. Topetazo.